De lo más bonito que hay en esta vida por mucho nos pueda
cabrear, es poder ver y escuchar la disparidad de opiniones y gustos que hay sobre una misma cosa o caso. De lo contrario, nos aburriríamos de manera sobre humana.
Yo por ejemplo, jamas he sido de programas y concursos de
cante (Como les llama mi suegro) sin ir mas lejos. Eurovision, para mi, es la
exhibición más absurda y falsa de lo que
debiera ser la ética imparcial a la hora de votar, pese a todo, un escaparate
por el que se dan de hostias "cantantes" y es que, salir en la tele vende cosa mala.
Por si fuera poco. Ahora nos machacan a concursos
paralelos en los que se hace creer a la audiencia, que son parte de la decisión
final... ¡¡Joer!! Que ilusión. ¿Que estamos todos en el paro? Es igual, los SMS
son baratitos y Eurovision muy bien vale el esfuerzo... que no sea todo fútbol y más fútbol.
Llevo varios días escuchando en los medios a una chica
berrea... Perdón, perdón. "Cantar a gritos" y me dije -esto no es normal, a
esta criatura nos la están metiendo con vaselina, algo buscan- y ¡¡Flop!! Resulta
que es la que nos representa en Eurovision.
Insisto en la falsedad que es para mi este euro concurso. Aún era la tele en blanco y negro la ultima vez que lo vi. Pero, si las decisiones
del jurado se basaran en lugar de amiguísimos y políticas, en escoger la mejor
canción. ¿De verdad alguien se piensa que
una joven gritando a pulmón ganaría?... No, enserio ¿De verdad hay alguien lejos de su entorno que lo piense enserio?
En fin, armado de pastillas para el dolor de colodrillo
hasta que se pase este bombardeo ridículo, padeceré un año más mi particular purgatorio, aunque casi hubiera preferido reencarnarme en gallina ponedora.
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