La mayoría de grandes superficies cierran a las 22,00 horas, a eso de menos cuarto anuncian que van a cerrar para que la peña se haga a la idea y coja camino hacia las cajas. Pero algunos de espalda ancha pasan hasta el culo (que se diría por lo bajo) y hasta que no les aprietan, nada de nada, mientras los que están todo el día currando tienen que esperar a que a estos les salga de la gana.
Pero, y si en lugar de a menos cuarto decir aquel mensaje de -señores clientes, el centro..... cerrará sus puertas en breve, agradecemos su atención y rogamos se aproximen a las cajas. Muchas gracias y buenas noches-, se dijera. -Atención señores clientes, nos comunican los cuidadores del centro psiquiátrico que hay aquí cerca, que se ha colado en la tienda un maníaco que se cree perro de presa. Es peligroso y muerde cosa mala, si lo ven, huyan, no traten de plantarle cara. La policía y los de la perrera están en camino- ¡bueno! y si al mensajito añadimos un tipo grandote con pijama o bata blanca, corriendo a cuatro patas por dentro de la tienda y ladrando de vez en cuando, genial. ¿Saldría la peña más rapìdo, o aún se recrearán con la talla de bañador de la niña?
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